ESCLAVAS DEL ESPACIO | 1987 ‧ Ciencia ficción/Aventura ‧ 1h 20m
Esclavas del espacio (1987), dirigida por Derek Ford, es una producción de ciencia ficción de bajo presupuesto que fusiona elementos del cine erótico con una narrativa distópica y futurista. Su trama, ubicada en un universo dominado por un régimen tiránico, sigue la historia de un grupo de mujeres secuestradas y sometidas a trabajos forzados en un planeta remoto, donde la lucha por la libertad se convierte en el eje central de la historia.
A pesar de su evidente explotación del atractivo visual de sus protagonistas y sus limitaciones técnicas, la película ofrece una crítica subtextual a las dinámicas de poder y la deshumanización bajo sistemas opresivos. Ford introduce un trasfondo distópico que recuerda a las obras de Philip K. Dick o incluso a la sátira mordaz de Paul Verhoeven, aunque sin alcanzar su refinamiento ni profundidad.
Visualmente, esclavas del espacio destaca por una estética que mezcla lo kitsch y lo retrofuturista, con diseños de producción que, aunque rudimentarios, logran evocar la sensación de aislamiento y desesperación en el árido planeta prisión. Sin embargo, la cinematografía se ve limitada por la falta de recursos, recurriendo a encuadres estáticos y efectos especiales que, incluso para la época, resultan modestos.
La película se encuentra en un punto peculiar entre el comentario social y el sensacionalismo, con un guion que, aunque intenta desarrollar personajes y conflictos, cae en clichés y diálogos pobres. Su verdadero valor reside en su capacidad para generar debate: ¿es simplemente un vehículo para la explotación visual o una metáfora inadvertida de las luchas contra la opresión? Esta ambigüedad, junto con su estética única y su aura de serie B, la ha convertido en una pieza de culto entre ciertos círculos.
En resumen, esclavas del espacio es una obra contradictoria: imperfecta y a menudo superficial, pero no carente de atisbos de crítica y reflexión. Es un recordatorio del potencial narrativo incluso en el cine más modesto, donde las limitaciones pueden convertirse en parte del atractivo.
Hoy estrenamos en CINEMATTE FLIX una película pulp que ha pasado ya a la historia del culto. ‘Esclavas del espacio‘ es el estreno gratis de hoy en tu videoclub online favorito y como puedes ver por su carátula, es una de esas películas únicas que jamás podrás ver en plataformas como Netflix
PELÍCULA INCRUSTADA DE LA WEB LEGAL DE VIDEOS OK.RU
En nuestra carrera por dejar ver al público actual todo la filmografía que pobló los estantes de videoclubs o salas underground de cine, traemos de nuevo una obra de ciencia ficción que podría entrar en el terreno del sexploitation más naif y suave y es que, Charles Band uno de los productores más prolíficos de la cara B de Hollywood durante los años 80 y 90 deja claro que su filmografía está repleta de títulos emblemáticos de la era de máximo esplendor de los citados videoclubes, esos templos analógicos donde las películas de Band encontraban el lugar idóneo para brillar, gracias a su desvergüenza, su utilización de conceptos básicos y efectivos y, también hay que reconocerlo, unas carátulas que se quedan como obras de arte del engaño y como simples obras de arte. Títulos como Re-Animator, Ghoulies, Robot Jox o Dolls hicieron las delicias de los gourmets del cine radioactivo y siguen siendo hoy admiradas por los espectadores más desprejuiciados y temerarios. Pero, en su filmografía hubo más cosas…
Y que, mientras Roger Corman tuvo Los 7 magníficos del espacio (Battle Beyond the Stars, Jimmy T. Murakami, 1980), Charles Band tuvo Esclavas en el espacio (Slave Girls from Beyond Infinity, Ken Dixon, 1987), una versión espacial de El malvado Zaroff (The Most Dangerous Game, Irving Pichel, Ernest B. Schoedsack, 1932).
Daria (Elizabeth Kaitan, acreditada como Elizabeth Cayton) y Tisa (Cindy Beal), escapan de la prisión espacial en la que están encerradas, logrando robar una nave en su huida. Al pasar cerca de un desconocido planeta, su nave empieza a fallar sin razón y se estrellan en este planeta. Allí se encuentran con otros náufragos y con Zed (Don Scribner), el amo del lugar. Zed, con la ayuda de sus robots, tiene un curioso pasatiempo: cazar humanos. Y ahora Daria y Tisa, junto al resto de náufragos (que incluye la estrella de la serie B y científica Brinke Stevens) son los próximos objetivos de Zed. Filmada con un presupuesto mínimo, es obvio que la película esperaba atraer espectadores (principalmente masculinos) con la promesa de un montón de chicas en diversos grados de desnudez en una gratuita sexploitation espacial. Pero lo cierto es que la explotación femenina es bastante mínima, las tres protagonistas se pasan gran parte del metraje con una especie de bikini y solo hay una escena de sexo, no muy distinta a la que se puede encontrar en cualquier película de otros géneros, con tono cómico y sin que se vea nada explícito. ESCLAVAS DEL ESPACIO
Además, esto se ve compensado con el hecho de que los personajes femeninos son bastante fuertes, en particular el interpretado por Elizabeth Kaitan (que muchos recordaréis por sus apariciones en Viernes 13 VII: Sangre nueva [Friday the 13th Part VII: The New Blood, John Carl Buechler, 1988] y Monstruos en la noche [Nightwish, Bruce R. Cook, 1989]), una intrépida e inteligente aventurera que pone contra las cuerdas al malvado Zed. Es una lástima que esta táctica publicitaria es posible que alejara muchos espectadores y espectadoras de lo que en realidad es una entretenida cinta de aventuras cuya ambientación espacial permite añadir robots, mutantes y pistolas láser a la historia. O puede ser que simplemente tengo debilidad por estas historias de caza humana y supervivencia que perdono las obvias carencias del film.
Tal vez es más esto último que cualquier otra cosa: es una cinta de serie B llena de momentos tontorrones, pero me mantuvo entretenido de principio a fin (apenas llega a los 80 minutos de duración, lo cual ayuda). En definitiva, una película para los amantes de la serie B más ligera y divertida. Como decía al principio, el argumento y el estilo que presenta el tráiler no tiene nada que ver con cómo es la película en realidad, pero aquí lo tenéis de todas formas. Recordar por cierto, que esta película se rodaba y estrenaba al mismo tiempo que el Depredador de JOhn McTiernan, sólo por tener una idea de los distinto que fue el cine de acción en una época…
UN POCO DE PULP ACTUAL
Era una desconocida, al menos hasta este pasado viernes, pero, ahora, la actriz Simone Missick también conocida con el apellido de Cook antes de casarse el actor Dorian Missick en febrero de 2012, es una estrella internacional y solo gracias a una cosa, a ser la estrella femenina de la genial Luke Cage, el nuevo éxito de Netflix.
Pero como supondréis, su éxito no es sólo debido a ser protagonista, es también debido a su físico espectacular el cual además se atreve a mostrar en varios planos y ocasiones. Con un acentuado y sensual cuerpo afroamericano, la actriz recuerda a algunas de las míticas damas de blackexplotation de finales de los 70 y encima, consigue recrear a una genial Misty Knight.Por lo tanto estamos ante una actriz de televisión estadounidense que ya pudimos ver en 2012 en el papel de Elise en la película para televisión El sabor de romance. En 2014, Missick apareció en la serie Ray Donovan como Porschla y ahora es ya una estrella a los tardíos 36 años pero, como dice el dicho, nunca es tarde.
Simone tuvo sus inicios en pequeños papeles muy secundarios como el de Jamie en 2003 en la película The Epicureans. En 2008 fue el film The Road to Sundance donde interpretó casualmente a otra Knight, en ese caso de nombre Reese Knight. 2009 participó en K-Town Newly con un papel tan simple y casi de atrezzo como el de Single Lady.
Sea como sea, ya está aquí, y Cinematte no puede dejar de presentaros a la nueva dama de Netflix o mejor dicho a la nueva dama de Harlem.
Para más información del personaje de Misty Knight decir que:
«Mercedes «Misty» Knight es un personaje ficticio de Marvel Comics que fue mencionada por primera vez en «Marvel Premiere #20» en enero de 1975 y que normalmente aparece con Colleen Wing.Misty se lesionó seriamente cuando intentó prevenir un ataque de bomba cuando era oficial de policía de Nueva York. Su brazo derecho fue amputado, por lo que renunció al cuerpo de policía. Tony Stark le proporcionó un brazo biónico que la dotó de fuerza sobrehumana. Poco después conoció a Spider-Man y a Danny Rand (Iron Fist).Misty se asoció con su amiga Colleen Wing en la lucha contra el criminal Emil Vachon en el área de Hong Kong. Salvó a Colleen de un intento de violación. Luego creó una agencia de detectives privados con ella, a la cual llamó «Nightwing Restorations Ltd.». Poco después de conocer a Iron Fist se enamoró de él. Misty realizó trabajos encubiertos contra el señor del crimen John Bushmaster. Ayudó a Iron Fist, Spider-Man y Colleen Wing contra «Davos, la Serpiente de Acero». Después de eso conoció a Luke Cage. La agencia de detectives de Misty ayudó a Luke Cage e Iron Fist en numerosos casos. Misty fue capturada y casi asesinada por «Nightshade». Luego ayudó a los X-Men contra «Moisés Magnum» en Japón. Luchó contra Sabretooth y fue rescatada de ahogarse por Iron Fist. Más tarde, cuando este rompió su relación con ella, empezó un corto romance con Luke Cage. Este episodio supuso una fuente de tensión entre Luke y Iron Fist por un breve período. ESCLAVAS DEL ESPACIO