La premisa es bien simple: Evan es un padre de familia feliz que se queda solo en casa el fin de semana por motivos de trabajo. Todo parece ir bien hasta que unas tías llamadas Genesis y Bel se presentan en su puerta con el objetivo de jugar a esconder la salchicha y lo que surja. Supongo que hasta aquí todo bien, sin embargo, la promesa de una «Funny Games» hipersexualizada se pierde rápido entre sus forzadas situaciones que no van a ningún sitio, sus personajes absolutamente carentes de fondo y su total falta de ritmo narrativo.
Resulta que Eli Roth siempre ha sido muy de gore y de terror, lo cual está muy bien, y nos presentan Knock Knock como una película de Eli Roth. ¿En qué quedamos? Porque en esta casa, de miedo hay lo mismo que en la aldea de Bambi. Y de gore ya ni te cuento, que se ven cuatro gotas de sangre contadas y no precisamente porque la hayan generado esas chicas violentas, sino por una herida previa…
No lo entiendo. Básicamente, acaba la película y no lo entiendo. Sí, sé la moraleja y me parece muy bien. Sé que pretenden, y me parece muy bien. Pero sigo sin saber qué sentido tiene todo esto. Un par de chicas aparecen sospechosamente en casa de un arquitecto, que tiene un pedazo jardín y una pedazo casa, pero por lo visto está abierta la casa para todos porque según tocan la puerta están ya dentro de la casa. Algo así como si en tu piso solo cerrases con llave el comedor y todos pudiesen entrar por las habitaciones. Bueno, aceptamos barco. Resulta que el tipo (interpretado por un Keanu Reeves absolutamente patético) se acuesta salvajemente con ambas mujeres, y al día siguiente las quiere tirar a la puta calle. Todo correcto. Pero ellas le amenazan y tal. Media hora después ya no están en la casa, pero vuelven, y de nuevo la cantinela.
El argumento es bastante lineal (de hecho no se para nunca), pero también es insustancial. Las pocas ideas parten de enseñar cacho e insinuarse, o bien de alguna estúpida «tortura» que carece de sentido. Existen muchísimas tonterías, como dejar «libre» a la persona que secuestras para que se esconda por la casa, sabiendo que podría tener armas (de hecho las tiene), pero oye, no os preocupéis…. que le sale mal, como no. Los tópicos son la salsa del absurdo. Pensad en todos y lo entenderéis. Memorable la escena del «amigo» experto en arte con las chicas. Vaya tela.
Con esta destructiva crítica os preguntaréis a que se debe mi 3 y no que le de un 1. Pues bien, se me ha pasado rápido el tiempo. Aun llevándome las manos a la cabeza varias veces y mentar al director por la mala actuación de sus actores, no es aburrida. Si no pecase del absurdo continuo tal vez podría haberla aprobado, pero eso es algo imperdonable. Espero que ustedes la disfruten, porque en mi caso ha sido imposible.
Reeves da vida en \’Knock Knock\’ a un padre de familia que e ha quedado solo en casa cuando un par de chicas llaman a su puerta pidiendo ayuda. Pocos después consiguen seducirle, pero las cosas se complicarán aún más cuando es torturado por ellas, quienes no dudan en iniciar un sádico juego sexual condenado a acabar de mala manera.
