Puntuación: ***
Visual: ***
Narrativa: *** 

Estamos en Mayo y ya hemos visto cuatro películas de superhéroes, tres de ellas con una temática podríamos decir similar, sobre todo dos. Si hacemos cuentas casi salimos a una al mes y eso señores, quizás empiece a ser un problema. Ahora vayamos a analizar la nueva obra de Bryan Singer la cual sólo lleva una frase por bandera: \»una más\».

Como vemos de números ha ido el párrafo de presentación pero es que de eso se trata. Las películas de superhéroes son el género de moda y la taquilla lo confirma en cada nueva producción pero como ocurre con toda burbuja, al final revienta.
Y la franquicia de X-Men parece que ya lo ha hecho. El último capítulo de la primera trilogía demostró síntomas de cansancio, algo que Mathew Vaungh se encargó de mitigar en la primera de la nueva trilogía pero aún así, la apatía ha regresado y más cuando Marvel Disney y DC Warner no paran de lanzar títulos sobre la misma temática.

Simon Kinberg es el encargado del guión y realmente no aporta nada que puede dejar a este film como un \’must see\’ de la temporada. Bryan Singer se muestra funcional pero tampoco aporta nada que haga destacar este último trabajo sobre el resto. Todos recordamos este año la escena inicial de Deadpool y eso, es detalle suficiente para ver que todavía se puede sorprender con alguna set piece diferente algo que no ocurre en este film ya que la aparición de Mercurio, que vuelve a protagonizar la mejor escena y a añadir un toque cómico muy de agradecer, ya fue vista en la película anterior.
Por momentos, da la sensación que X Men Apocalipsis intenta alimentarse de la nostalgia y eso le acaba perjudicando más cuando estamos ante el cuarto film superheroico del año. La película se muestra conservadora y mirando más hacia lo que fue, que hacía lo que puede o debe ser.
La saturación también afecta a los personajes, ya que no saben cómo darles verdadera entidad, y en algunos casos llega a ser tan sangrante que para eso casi mejor no haberlos utilizado (Tormenta y Psylocke).

En el lado positivo tenemos la producción y es que, Fox esta vez no ha escatimado el dinero por lo que la espectacularidad de las escenas de acción, del vestuario, del arte y de los FX están asegurados pero por desgracia, eso no palía que estemos ante una película sin una identidad clara más allá de héroes luchando contra villanos.
En definitiva, ‘X-Men: Apocalipsis’ no es una película mala, quizás está a la par que el Batman V Superman de Zack Snyder pero, donde en uno vemos personalidad y riesgo, en el otro vemos continuismo y conservadurismo. Por eso, de los cuatro films vistos hasta ahora, X-Men no es el peor, pero si el más vulgar.
Al igual que desde las primeras imágenes de Suicide Squad (el quinto film de año que está a punto de llegar) se ha visto originalidad y fuerza por los cuatro costados, con la obra de Singer ha ocurrido todo lo contrario. La linealidad ha sido su constante y eso a estas alturas de la película, pasa mucha factura.

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